Enfermedades de geranios

Los geranios son plantas resistentes, pero aún así es bueno que tengamos presentes las enfermedades que pueden afectarles para prevenirlas antes de que aparezcan. A continuación veremos dos de las enfermedades más comunes en geranios.

Bacteriosis del geranio

Ésta es la primera enfermedad que puede aparecer inmediatamente después de la compra de los geranios. No hay remedio para luchar contra esta plaga, pero sí podemos detectarla antes de su compra. Debemos tener cuidado con no comprar plantas infectadas porque su presencia en una terraza o en un jardín es muy perjudicial por su rapidez de difusión.

En caso de ver que la enfermedad afecta a nuestros geranios, retira inmediatamente las plantas infectadas para garantizar la salud de los demás geranios. Si puedes te recomendamos que incluso las retires eventualmente a un lugar más seguro.

Conozcamos a continuación los principales síntomas de la bacteriosis del geranio.

- Sobre las hojas de los geranios podremos apreciar manchas amarillas y marrones, por lo general de forma triangular.

- La marchitación de las hojas se observan sobre todo en las hojas más viejas. En un primer momento podemos pensar que es falta de agua, pero si es bacteriosis comprobarás que el problema persiste después de regar.

- El tallo de los geranios afectados presentan una mancha de color marrón en el área cercana a los capullos florales.

La lucha consiste en eliminar las plantas que presentan estos síntomas y renovar completamente la tierra. Como medida de precaución puedes aplicar una técnica de desinfección que consiste en tratar el suelo infectado con productos a base de cobre antes de realizar las nuevas plantaciones.

Mariposa del geranio

 Esta plaga tan dañina para los geranios proviene de África. En ese continente la mariposa causante de esta enfermedad tiene enemigos naturales y no se considera una plaga, pero en Europa no hay ningún depredador o parásito que pueda acabar con ella.

 Esta mariposa de alrededor de 2 centímetros de envergadura pone sus huevos sobre los capullos florales y sus larvas penetran en ellos, comiéndose los capullos hasta vaciarlos. Una vez han acabado con los capullos pasan hacia el tallo.

Una vez infectada la planta es muy difícil combatir esta plaga, pero si es posible prevenirla aplicando productos especiales que espantan a estas mariposas. Una vez afectada la planta puedes intentar salvarla cortando los tallos que hayan podido ser afectados e intentar sanear el resto de la planta.